Siento defraudar a mi respetable público, pero no tengo evento glamouroso que contar, ni personaje público a quien despellejar (aunque dejadme 2 días que mañana tengo una fiesta).
Ultimamente me he retirado algo del mundanal ruido, de las candilejas y de la vida crápula... He decidido reorientar un poco mi vida, limpiar mi organismo con deporte y dieta sana y alimentar (por fin!) la psique... Y no, no he ingresado en la López Ybor con politraumatismo encefálico debido a una caída en la ducha causada por una ingesta desmedida de barbitúricos, como dicen las malas lenguas!!!!. (peeeeeeeeeeeeeerras!)
¡¡¡¡Pero si para un día en toda la Semana Santa que decido salir de mi retiro espiritual y me planto el top y los tacones para reventar el Estereo, me ponen a perseguir un trono (que para más inri, no era el mío!!!!) y a cantar salves y saetas bajo una lluvia del carajo hasta las 5 de la mañana, joder!!!. Si lo llego a saber, al menos me pongo el disfraz de barby-manola!.
Eso sí, he tenido un episodio digno de Carmina en sus mejores (o peores??) momentos.
El Lunes decidí exprimir el día de playa al máximo y la compañía de mis padres y mi niña-Lola y volverme a Madrid en el bus de las 12 de la noche... Sí, sí, lo que oís, qué le vamos a hacer, mi "jet" privado no pudo salir. Mi piloto se enamoró perdidamente de uno de San Javier de la patrulla Aguila, le dí el día (yo me ablando ante una historia de amor y lujo) y he tenido al pájaro dándole a la doble pirueta mortal hasta esta mañana. Bueno, el caso es que me tocó viajar con media Bolivia hacia Madrid y para soportar el trauma (este sí, encefálico) mi madre me surtió con una "pastillita de nada", de esas que aseguran el sueño de Morfeo ipso-facto. Yo, que no soy nada dada a estas cosas, aunque haya gente mala por ahí que diga lo contrario, con cierto recelo y algo de "repelús" me tomé medio Orfidal (o debería llamarse Morfidal?)... pero chica!, que en Albacete seguía con los ojos como platos, me había bailado 3 ballenatos y eran casi las 3 de la mañana... así que decidí tomarme la otra mitad....
FUNDIDO EN NEGRO
No sé ni cómo llegué a casa. Quizás con el peruano de la ocarina y su banda de música?? o en la voyager del albañil de mi izquierda??? Quizás me trajo el gitano en su "fregoneta"???... Ay!, paya, no sé. Lo siguiente que recuerdo es la llamada de mi compañera de curro, que estaba preocupada por si había sido la 59 víctima de la carretera.
Llegué a las 10,30 a trabajar, dando tumbos y hablando "pa'trás"... pero con todos mis órganos vitales, sobre todo la cartera.
Un beso, darlings.
AR
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1 comentario:
Que notición AR, la glamourosa se mezcla con la plebe. Siempre es bueno bajar al mundo de los mortales para ver lo que se cuece.
Y ademas sigues contandolo con la misma gracia de siempre.
Aunque pensandolo bien se me ocurre una pregunta ¿cuantas veces la difunta Carmina hizo un largo recorrido en el coche de linea?
JUAN
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