EL SHOW DE LA FRITANGA

El pasado sábado, el litoral se traslado a la capi y decidimos salir. Dadas las horas que eran y que Madrid estaba colapsado de gente, no estábamos en condiciones de buscar restaurante para cenar de forma exquisita, así que decidimos entrar al primero que encontráramos a tomar unas raciones.
Entramos a uno de forma consensuada y nos dijeron que había sitio.

Nos subieron a la parte de arriba del bar que era el restaurante y al verlo, nos recordó al lugar donde Lolita debió celebrar su boda, de finales de los años 80, un gotelé verde horroroso en la paredes, las sillas vestidas con funda de tela que las recubrían enteras hasta con un lazo, todo lleno de fotos de grandes divas como Lina Morgan,Encarnita Polo, Manolo Escobar, Rosa Valenty... acompañadas de un señor en todas las fotos, que parecía a Juan El Golosina pero en moreno, debía ser el manager de aquella época.
Eramos 6, y estaba medio vacío pero el camarero le dio por jugar al tetris y mover todas las mesas sillas para acomodarnos, con lo fácil que era sentarnos en una de 6 que había libre.
Pedimos unas raciones y la frase mas repetida de toda la noche era TODO CASERO, que por cierto, era verdad y estaba muy bueno.
El restaurante tenia calefacción, estaríamos a unos 35 grados. ASFIXIAITOS estábamos.
Llego la hora del café, y se me ocurre pedir un segundo azucarillo. El camarero busca entre los bolsillos de su uniforme(con más lamparones que el babero de un parkinsoniano) y me saca un sobre de azúcar chuchurrio, así que llegamos a la conclusión que como ponia en el slogan del sobre, el azúcar era de 1958.
Luego traen el descafeinado de Nuria y al echar la leche la jarra, que era como la jarra con la que le servían el desayuno a Sara Montiel cuando hizo la comunión, empieza a derramarla por toda la mesa. Pero el hombre nos aclaro que el pitorrillo de la jarra no era demasiado preciso.

Total que pagamos después de múltiples risas, y ponemos rumbo al Penta.
Pero cual es nuestra sorpresa al salir del bar que OLEMOS A FRITANGA.
Perfumados con la nueva esencia, AIR FRITANGA de Loewe, apestamos vagones de metro, pasillos, bares...
Somos distintos al resto. CUANTO GLAMOUR. Me recuerda a la reciente comida, aquí contada de AR.

Menos mal que luego en El Penta(bar maravilloso) que a las cartageneras os encantaría. Nos reímos, bailamos, referimos cosas del resto, bebimos al ritmo de la música del POP de los 80 nacional para concluir con LA CHICA DE AYER de Nacha Pop, ya que fue en este bar donde se inspiró esta canción.
Todo esto dió para risas permanentes toda la noche, y os aconsejo esta nueva esencia porque a pesar de todo la gente se partia con nosotros, nuestros gritos, cantos, risas... y en fin se montó EL SHOW DE LA FRITANGA.
Es un glamour algo más rural que el de AR, pero glamour al fin y al cabo.

UN BESO CHURRETER@S , JUAN